Las empresas que nos dedicamos a venta y compra de chatarra en Barcelona hemos visto en los últimos años cómo ha crecido el volumen de aparatos electrónicos que llegan a nuestras instalaciones: teléfonos móviles, portátiles, ordenadores de sobremesa, smartphones, tablets… Algunos, incluso, aparentemente en perfecto estado de funcionamiento. En principio, estos aparatos están diseñados para tener una vida útil de alrededor de los diez años, pero la realidad es que, al cabo de sólo uno o dos años, un móvil, por ejemplo, se queda obsoleto porque los propios fabricantes, en ese mismo periodo han sacado a la venta varios modelos con nuevas prestaciones.

Para RMI Industrial 2050, dedicados a la compra de chatarra en Barcelona, la recepción de este tipo de aparatos nos presenta algunos pequeños problemas. Aunque en su interior contienen diferentes metales, y algunos de ellos bastante cotizados, también tienen un elevado grado de toxicidad. Metales como el plomo, el mercurio, el cadmio o el arsénico, forman parte de la composición de muchos de estos aparatos. Durante el proceso de extracción de estos metales mediante un proceso de fundición, se pueden  liberar toxinas al aire o a la tierra, por lo que es una tarea que sólo se debe realizar en condiciones muy controladas.

La mejor opción ambiental para los residuos electrónicos debería ser su reutilización hasta agotar completamente su vida útil. Hay muchas opciones para reutilizar estos aparatos: Decenas de bibliotecas y colegios, asociaciones y ONGs, o simplemente, personas con menos recursos que no necesitan un equipo de última generación. Por eso, antes de tirar a la basura o tu móvil, tu portátil o tu tablet, piensa si no se la puedes donar a alguien que los pueda necesitar.